Content area
Full Text
Mariano Picón Salas es el primer ensayista de nuestra historia literaria. Con esto no queremos decir que sea el primero en cultivar tal género sino que fue quien logró llevarlo a su madurez y realizarlo como tal en la historia de nuestras letras.
Sin embargo no cultivó sólo el ensayo. El mismo definió sus escritos al afirmar "historia, ensayo y creación son las tres vertientes de mi obra" (Pedro Grases: Obras. Barcelona: Seix Barrai, t.VII, p.371) pues así como dejó fundamentales ensayos, intentó una historia sistemática de la cultura hispanoamericana, otra de la evolución literaria venezolana. Escribió también varios libros de creación: novelas y narraciones cortas.
Picón Salas nació en Mérida (enero 26, 1901). Fueron sus padres Pionono Picón Ruiz y Delia Salas Uzcátegui. En su ciudad natal realizó los estudios elementales, de educación media e inició los universitarios en derecho. En 1917 leyó en la universidad emeritense su disertación Las nuevas corrientes del arte (Mérida: Tipografía El Lápiz, 1917. 19p.). Antes de pasar a Caracas publicó En las puertas del nuevo mundo. (Mérida: Universitatis Andinenssis, 1918. 24 p.) y se aventuró en la edición de una revista Arístides Rojas, la cual publicó en 1918. En sus días merideños trabó amistad con quienes en el futuro serían importantes escritores del país como Mario Briceño Iragorry (1897-1958). Emilio Menotti Sposito (1892-1951) lo introdujo en nuevas lecturas, así lo recordará en Las nieves de antaño. (Maracaibo: Universidad del Zulia, 1958.140 p.).
En 1920 se trasladó a Caracas, ciudad en donde continuó sus estudios superiores. Siguió escribiendo y publicando. Colaboró en la revista Cultura venezolana. En él mucho influyó, desde esos días Alberto Adriani (1898-1936). A poco publicó su primer libro de ensayos Buscando el camino. (Caracas: Ediciones Cultura Venezolana, 1920.149 p.) en el que Luis Beltrán Guerrero (1914-1997) encontró esbozadas las líneas fundamentales de su pensamiento en relación con la literatura venezolana (Candideces. Cuarta serie. Caracas: Editorial Arte, 1965, p. 191). También se inició como narrador con su cuento Agentes viajeros. (Caracas: La Lectura semanal, 1922. 22 p.).
En 1921, como el propio Picón Salas confió a Rufino Blanco Fombona el doctor Esteban Gil Borges, bajo cuya égida laborada, dejó de ser Canciller. Esto le hizo comprender con mayor claridad la dura realidad que vivía el...