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Son las ocho de la mañana cuando veo a Greta Thunberg por primera vez, y ya se ha reunido una pequeña multitud para verla. Es viernes, su día de protesta semanal, y la joven de 16 años está de pie frente al edificio rosa del Parlamento, junto a un cartel desgastado que dice "huelga escolar por el clima" en sueco. El sol de febrero apenas aparece sobre Estocolmo. Thunberg es un poco difícil de detectar, porque es tan pequeña; mide menos de cinco pies de altura. Su cara se asoma entre un gran sombrero y una gruesa bufanda. "Bueno, hace calor hoy", dice con una sonrisa, cuando le pregunto cómo va la protesta. Hay 5 ºC y no siento mucho calor. Ésta es la 26ª semana de su huelga escolar, que realiza todos los viernes desde que comenzaron las clases en agosto, incluyendo las vacaciones. En ese tiempo, ella ha adquirido un nivel repentino de fama e influencia que casi nadie, ni siquiera ella misma, esperaba. En los últimos seis meses, se ha convertido en una superestrella del movimiento contra el cambio climático. Los medios resaltaron su huelga escolar, la cual comenzó cuando ella se sentó sola sobre una estera junto al Parlamento sueco. Luego vino una charla de Ted, discursos en mítines y una invitación para hablar en las conversaciones de la ONU sobre el tema. Inspirados por su ejemplo, los estudiantes huelguistas en toda Europa se incrementaron a miles, luego a decenas de miles, y todo gracias a esta adolescente frente a mí con su cabello trenzado. Durante años, el cambio climático ha sido un gran problema que ha carecido de líderes. Políticos, celebridades y naturalistas han defendido la causa; por ejemplo, Al Gore, Leonardo DiCaprio, Jane Goodall. Pero nadie ha capturado el espíritu de lo que le está sucediendo en el planeta tanto como esta adolescente autista, con su simple mensaje: me están robando el futuro. Su protesta se ha hecho eco porque llega en un momento muy sombrío. Las emisiones globales de dióxido de carbono alcanzaron un nuevo nivel récord el año pasado, lo que puso de manifiesto los límites de décadas de negociaciones sobre el cambio climático. Las temperaturas han aumentado: los últimos cinco años fueron los más calurosos desde...