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Alejandro Sanz es el numero uno en Espana, supero los tres millones de copias de su album Mas, abarroto foros y plazas de la Madre Patria y ya se introdujo al mercado portugues, brasileno, tailandes, frances, italiano y aleman gracias al "Corazon Partio"; ahora vuelve a Mexico a compartirse con su publico
Echar un vistazo a las cifras de Alejandro Sanz da vertigo. El salto cualitativo que este cantautor de origen gaditano ha dado en el panorama musical espanol este ano, recuerda en cierto modo al dado, en su momento en Mexico, por Luis Miguel con su disco Romance, en 1991.
Para que el publico mexicano lo aprecie mejor, se puede decir que Mas acaba de ser a Alejandro Sanz lo que Romance fue en su dia a Luis Miguel. Resultado, ni mas ni menos que Alejandro se acaba de coronar como rey musical de Espana rompiendo la barrera del publico adolescente, ocupando minutos y tintas de publicaciones y noticieros considerados serios (se ha ganado elogios del diario El Pais, uno de los mas estrictos en este aspecto, lo cual asegura que le satisface y le ayuda en su autoestima) y postrando ante si el mayor reto de su vida: mantener tan privilegiada posicion, alcanzada con solo cuatro discos en el mercado y una gira historica en cuanto a registro.
Y para muestra de tal hazana no haya mas que dar un repaso a los numeros que el "Corazon Partio" ha generado.
Mas ha vendido solo en Espana la nada despreciable cantidad de un millon 500 mil copias, cifra que se multiplica por dos al contar el resto del mundo y se eleva a los tres millones.
Ha sido 15 disco platino en su pais, triple platino en Estados Unidos, Argentina y Venezuela, platino y triple disco de oro en Mexico, doble platino en Colombia, Chile, Peru, Centroamerica, Bolivia, Ecuador, Paraguay y Uruguay. Platino en Portugal y disco de oro en Tailandia. El disco se acaba de editar en Francia, Alemania, Belgica, Italia, Suecia, Japon, Hong Kong, Taiwan, Australia y Brasil, pais este ultimo en el que ha entrado con fuerza inusual dada su inclusion como cabecera de una telenovela.
Lo curioso es que tras ese rosario de platinos Alejandro pone cara de nino inocente...