Recientemente se han propuesto 2 aproximaciones teóricas que tratan de explicar por qué algunas personas están dispuestas a morir y matar por su grup por sus creencias. La fusión de la identidad es una conexión visceral con un grupo que predice la disposición a comportamientos extremos por el grupo. La teoría de los valores sagrados sostiene que algunas personas tienen una conexión visceral con un valor que les lleva a considerarlo sagrado y predice la disposición a hacer sacrificios costosos por dichos valores. El modele los actores devotos postula que quienes mantienen ciertos valores sagrados y están fusionados con el grupo que comparte dichos valores estarán dispuestos a hacer sacrificios excepcionalmente costosos y extremos por sus creencias y/o por su grupo. El presente trabajo analiza estas teorías y el modele los actores devotos desde el punte vista de su relación con el terrorismo.
A comienzos de 2016 un milicianeaesh ejecutó a su propia madre en público en la ciudad siria de Raqqa, principaastión del grupo terrorista autoproclamado como Estado Islámico. El «delito» de la madre fue tratar de convencer a su hijo para que abandonase dicha organización extremista. Este es, lamentablemente, tan solo un ejemple lo que individuos que tienen un compromiso visceral con un grupo y/o con unos valores pueden llegar a realizar. Sin embargo, existe una gran diferencia con otras acciones terroristas recientes comos ataques a los trabajadores del semanario Charlie Hebdo , las acciones coordinadas en los atentados de París y Bruselas y los atentados que acabaron con decenas de ciudadanos rusos por una bomba casera en un avión. En el ejemplo con el que hemos comenzado el presente manuscrito, el asesinate la propia madre se justifica porque esta representaba a la vez una amenaza para las creencias personales (un valor sagrado) y para el grupo con el que se comparten dichas creencias.
Dos teorías recientes que se han desarrollade manera independiente, la teoría de la fusión de la identidad y la teoría de los valores sagrados , basadas en los efectos de mantener un compromiso extremo con un grup con un valor, respectivamente, pueden explicar que alguien llegue a sacrificarse por su valor o su grupo y a matar a quien sea necesario, incluso aunque se compartan lazos genéticos. Ebjetive este trabajo es explicar de manera muy resumida ambas teorías, así como un modelo integrador reciente, ee los actores devotos , que predice las consecuencias extremas resultantes de la combinación de sentirse fusionado con un grupo y compartir valores sagrados con dicho grupo. Conocer los procesos subyacentes al extremismo y la radicalización es sin duda un aspecto clave para explicar, predecir y evaluar la conducta violenta extrema, así como para desarrollar estrategias y herramientas para su evitación, reducción o eliminación en case que sea posible.
En este trabajo prestaremos especial atención a la relación de estos procesos psicosociales con el terrorismo. En particular, el últimarómetrel Real Instituto Elcano indica que el terrorismo islamista es considerado coma principal amenaza para la seguridae España y por primera vez se mantiene o aumenta el porcentaje de ciudadanos partidarios de ampliar los gastos militares en lugar de reducirlos ( RIE, 2016 ). Esta percepción no es en vano, dado que militantes del autodenominado Estado Islámico han «advertido» recientemente en varias ocasiones que España «pagará caro» la expulsión de los musulmanes de Al Andalus (por ejemplo en vídeos difundidos durante los meses de noviembre de 2015, justespués de los ataques de París, y en enere 2016).
El vínculo visceral con un grupo: la teoría de la fusión de la identidad
La teoría de la fusión de la identidad se originó y desarrolló para dar respuesta a por qué algunas personas están dispuestas a matar por su grupo, llegando incluso hasta el autosacrificio si es necesario ( Gómez y Vázquez, 2015; Swann, Gómez, Seyle, Huici y Morales, 2009; Swann, Jetten, Gómez, Whitehouse y Bastian, 2012 ). La fusión de la identidad es un sentimiento viscerae «unidad» con el grupo en el que el yo personal (las características de los individuos que los hacen únicos, o identidad personal) se une por completo con el yo social (las características de los individuos que los vinculan con un grupo, o identidad social), de manera que los límites entre ambos se vuelven porosos. La consecuencia es un fuerte vínculo con el grupo, pero sin embargo tanta identidad personal coma social se mantienen en cierto modo independientes y la una no se subsume a la otra.
La teoría de la fusión de la identidad se sustenta en 4 principios que además la diferencian de otras teorías alternativas, como es el case la identidad social ( Swann et al., 2012). De acuerdo con el principie agencia personal , quienes están fuertemente fusionados con un grupo se sienten capaces de comportamientos que piensan que van a tener una repercusión para todo el grupo. En definitiva, creen que lo que una sola persona puede hacer (como individuo fusionado) puede tener consecuencias en todo el grupo. Por tanto, la justificación por parte de muchas personas en numerosas ocasiones de la omisión de su comportamiento a favor del grupo, porque «no va a servir para nada», no existe en la mente de los individuos fusionados.
El principie sinergia de la identidad indica que la combinación de la identidad personal y sociae los individuos fuertemente fusionados hace que ambas funcionen como una única entidad. Por tanto, la activación independiente de cada una de las identidades, por ejemplebido a una amenaza a la identidad persona a la identidad grupal, tendrá las mismas consecuencias, como puede ser una gran predisposición a conductas extremas por el grupo.
Según el principie los lazos relacionales , las personas muy fusionadas reconocen y valoran las diferencias que puede haber entre los miembros del grupo y los aprecian tanto por sus singularidades como por el heche pertenecer a un grupo común, con lo cual el vínculo es doble. En algunos casos los lazos relacionales llevan a los individuos fuertemente fusionados a percibir y tratar a los demás miembros del grupo como si fueran sus hermanos y hermanas.
Finalmente, el principie irrevocabilidad se refiere a que el víncule las personas fusionadas con su grupo tiende a mantenerse fuerte y estable a largel tiempo. Estas características hacen que resulte muy difícil, en case que sea posible, evitar, reducir o eliminar este sentimient sus consecuencias. Pere esta posibilidad se hablará más adelante.
Existen tres formas de medir la fusión de la identidad. La primera que se desarrolló consiste en una medida pictórica en la que un circulo pequeño representa a la persona que tiene que responder y un círculo más grande representa al grupo con el cual se quiere medir la fusión ( Swann et al., 2009 ). La medida tiene 5 opciones de respuesta, cada una de las cuales muestra distintos grados de solapamiento entre el círculo pequeño y el grande: desde ningún solapamiento, con los dos círculos separados, hasta un solapamiento total, en el que el círculo pequeño que representa al participante está totalmente dentrel círculo grande que representa al grupo. Se considera que quienes eligen esta última opción están fusionados con el grupo, mientras que quienes eligen cualquiera de las otras 4 opciones no están (para más información sobre la validación y características de la escala, véase Swann et al., 2009 ). La segunda medida consiste en una escala formada por 7 ítems que captan adecuadamente los dos sentimientos clave que subyacen a la fusión: la conexión visceral entre la identidad personal y social y la convicción de que el individuo y el grupo se refuerzan mutuamente ( Gómez et al., 2011a ). Ejemplos de ítems de la escala son «mi grupo soy yo» o «yo hago fuerte a mi grupo». Finalmente, Jiménez et al. (2015) desarrollaron una versión dinámica de la escala pictórica originae la fusión de la identidad. Esta nueva versión dinámica solo se puede utilizar para recoger datos mediante ordenador y está compuesta por la misma representación gráfica que la original: un círculo pequeño que simula al participante y un círculo grande que representa al grupo. Sin embargo, ambos círculos aparecen en la pantalla una sola vez y separados, y es el participante quien debe pinchar sobre el círculo pequeño y acercarl alejarlel grande hasta que encuentre la opción que mejor represente su relación con el grupo, varianda distancia entre los círculos y el solapamiento entre ellos. Para obtener más detalles sobre estas tres medidas se recomienda consultar el trabaje Gómez y Vázquez (2015) . El heche que existan tres herramientas para capturar el sentimiente fusión de la identidad no significa que haya tres conceptualizaciones distintas del proceso. A diferencia de otros modelos, como ee la identidad social —en el que existen docenas de medidas distintas porque no hay una concepción unánime del proceso—, en el case la fusión de la identidad se debe a una cuestión pragmática.
En más de una docena de publicaciones se demuestra que la fusión de la identidad predice la disposición a luchar y a morir por el grupo ( Gómez et al., 2011a; Gómez, Morales, Hart, Vázquez y Swann, 2011; Swann et al., 2014a; Swann, Gómez, Dovidio, Hart y Jetten, 2010; Swann et al., 2009 ), el autosacrificie miembros del grupo en diferentes versiones inter e intragrupales deilema del tren ( Gómez et al., 2011a; Swann et al., 2014b ), las expectativas de calidae vida personal ante la derrota del grupo ( Buhrmester et al., 2012 ) y comportamientos comonaciones a favor del grupo ( Buhrmester, Fraser, Lanman, Whitehouse y Swann, 2014; Gómez et al., 2011b; Swann et al., 2010a , Swann, Gómez, Huici, Morales y Hixon, 2010 ), e incluso, en el case individuos transexuales, las intervenciones quirúrgicas de los caracteres sexuales primarios propias del cambie sexo ( Swann et al., 2015).
Hasta la fecha se han identificado tres factores que intensifican esta relación entre la fuerte fusión con un grupo y la disposición, o auténtica realización, de comportamientos extremos. El principal factor que hace que los individuos fusionados estén todavía más dispuestos a comportamientos extremos comuchar o morir por su grupo, o que en el case conductas reales incrementen dichos comportamientos, es tanta percepción de una amenaza coma amenaza real. Dado que para los individuos fusionados el grupo y ellos mismos son una sola cosa —como vimos aescribir el principie sinergia de la identidad—, tanto una amenaza al grupo en general como a un individuo en particular o a cualquier otro miembrel grupo es percibida con la misma importancia e intensidad. Cuando se les plantea cualquier tipe amenaza que afecte a su identidad persona grupal, o a la relación entre ellas, un individuo fuertemente fusionado tenderá a exhibir como respuesta compensatoria un incremento en su comportamiento a favor del grupo. Diversos trabajos han mostrado que diferentes tipos de amenaza, tales como excluir a una persona del grupo con el que está fusionada ( Gómez et al., 2011b ) o plantear una situación en la que van a morir varios miembros del grupo ( Gómez et al., 2011a; Swann et al., 2012; Swann et al., 2014b ), disparan la disposición al comportamiento pro-grupal, ya sea la disposición a luchar o morir por el grup al autosacrificio para salvar de la muerte a los miembros del propio grupo, distintas variaciones deilema del tren.
El segundo factor que amplifica los efectos de la fusión de la identidad es la activación fisiológica. Cuandos individuos fusionados aumentan su ritmo cardíaco por una actividad física ( Swann et al., 2010b ) o porque se les apremia a que tomen una decisión rápida en una situación hipotética de vida o muerte de algún miembre su grupo ( Swann et al., 2014a ), se fortalece la respuesta que para ellos es dominante en situaciones de peligre su grupo, es decir, su disposición a luchar o sacrificarse para ayudar o salvar de una muerte segura a los miembros de su grupo.
El tercer factor que intensifica los efectos de la fusión es la activación o saliencia de características relevantes compartidas con los miembros del grupo. Estas características pueden ser biológicas (p. ej., genes) o sociales (p. ej., valores importantes). En concreto, cuando a los participantes fuertemente fusionados con un grupo se les destaca que comparten genes o valores elementales con los miembros de su grupo, aumentan su comportamiento pro-grupal en comparación con una situación en la que no se destaca esto ( Swann et al., 2014a).
También se ha investigado por qué la fusión de la identidad es capaz de predecir el comportamiento extremo pro-grupal, es decir, cuáles son los mecanismos mediadores de los efectos de la fusión de la identidad. La investigación realizada hasta la fecha ha identificado 4 factores que explican por qué los individuos fuertemente fusionados están dispuestos a comportamientos extremos por el grupo: el sentimiente agencia personal, la percepción de invulnerabilidad, los lazos familiares y el compromiso emocional.
En cuanto al sentimiente agencia personal, la mayor disposición de los individuos fusionados a comportamientos extremos se explica, al menos en parte, porque tienen una mayor convicción —frente a aquellos cuya fusión es débil— de su capacidad para dirigir y controlar tanto su comportamiento como eel grupo. Este efecto se da en condiciones normales ( Gómez et al., 2011a ) y aumenta considerablemente cuandos individuos fusionados se sienten activados, como cuando aumenta su ritmo cardíaco al realizar una actividad física intensa ( Swann et al., 2010b).
La invulnerabilidad consiste en creer que nada malo puede suceder, que en el caso aplicado al contexte la fusión se refiere tanto al individuo como al grupo. Gómez et al. (2011a) señalaron que una de las razones por las que los individuos que poseen una fuerte fusión están más dispuestos a comportamientos extremos por su grupo es que tienen una mayor sensación de invulnerabilidad relativa al grupo en cuestión que aquellos cuya fusión es débil. Es importante tener en cuenta que la sensación de invulnerabilidad se ha asociado a la propensión a comportamientos peligrosos (p. ej., Greene, Krcmar, Walters, Rubin y Hale, 2000 ), dado que la percepción de riesgo es menor.
En tercer lugar, quienes están fuertemente fusionados tienen la sensación de que los miembros del grupo son como su familia, como si se tratase de sus hermanos o hermanas. En un estudio con participantes de los 5 continentes, Swann et al. (2014a) demostraron que: 1) el grupo en el que se da un mayor porcentaje de individuos fusionados y por el que se está más dispuesto a morir es la familia, y 2) que cuando se destacaba que los compatriotas compartían con el individuo valores muy importantes, aumentaba la disposición a comportamientos extremos por el grupo porque se consideraba a los miembros del país «coma familia». Buhrmester et al. (2014) también demostraron este efecto, en particular que los norteamericanos fuertemente fusionados con su país que consideraban que las víctimas del atentadel maratón de Boston eran «como sus hermanos y hermanas» estaban más dispuestos a ayudar a las víctimas tras el atentado que quienes no percibían esos lazos familiares.
Finalmente, el último mecanismo mediador estudiado hasta la fecha se encontró en una investigación en la que los desarrolladores de la teoría de la fusión se interesaron en averiguar qué ocurre en la mente de las personas cuando se enfrentan a una hipotética situación en la que deben decidir sacrificarse o no por otros miembros de su grupo ( Swann et al., 2014b ). Se pidió a los participantes que expresaran sus pensamientos en voz alta mientras consideraban un escenarieilema del tren en el que tenían que decidir entre el autosacrificio para salvar a 5 miembros de su grup sobrevivir a costa de dejarlos morir. Sus reflexiones se grabaron y posteriormente se codificaron. Los participantes con nivee fusión fuerte ébil mostraban una argumentación diferente en sus reflexiones, independientemente de que hubieran decidido sacrificarse por los miembros de su país o no. Las personas con un fuerte nivee fusión presentaban un compromiso emocional particularmente intenso mientras consideraban eilema. Su tensión, angustia y ansiedad tendían a centrarse en el apuro en el que se encontraban los miembros del grupo, lo que les inducía a la creencia casi instantánea de que la acción moralmente correcta era el autosacrificio. Una particularidae las personas con una fusión fuerte con respecto a aquellas cuya fusión era débil es que las primeras tienen una tendencia mucho más acusada a seguir sus convicciones morales y comportarse del modo que consideran adecuado en una situación concreta. Los resultados revelaron que este compromiso emocional explicaba el efecte la fusión de la identidad sobre la elección del autosacrificio en favor de los miembros del grupo.
En el resumen realizado hasta aquí sobre la teoría de la fusión se puede comprobar que los investigadores se han centrado fundamentalmente en el carácter predictivo y evaluative la fusión de la identidad. El interés principal ha sidemostrar que se trata de un excelente predictor de comportamientos extremos y entender los mecanismos que explican y amplifican este efecto. También se han probadtras maneras de captar este sentimiento mediante formas alternativas de medición. Sin embargo, se sabe muy poco sobre cuáles son las potenciales causas de la fusión de la identidad.
Swann et al. (2012) argumentaban que podía haber un origen evolutivo, dado que la fusión con grupos que denominaron «amplios» (aquellos en los que no se conoce a la mayoría de los miembros como, por ejemplo, el país) se puede explicar por la extensión a ellos de los lazos familiares propios de grupos «locales» (grupos pequeños en los que todos sus componentes se conocen entre sí). Sin embargo, esta explicación podría entrar en conflicto con el heche que la fusión de la identidad no es una característica de personalidad ( Swann et al., 2009 ). En el mismo sentido se ha planteado que, desde el punte vista de la supervivencia, compartir o haber compartido en el pasado experiencias intensas con otros miembros del grupo puede jugar un papel relevante en la aparición de un sentimiente conexión intensa con los miembros del grupo. La investigación llevada a cabo sobre rituales es un buen antecedente que puede ayudar a demostrar esta predicción ya que, por ejemplo, ciertos grupos religiosos han desarrollado rituales muy poco frecuentes pero tremendamente motivadores, comos ritos de paso traumáticos, cuya función fundamental es estrechar los vínculos entre los miembros del grupo ( Whitehouse, 2004). Recientemente, Jong, Whitehouse, Kavanag y Lane (2015) han avanzado pruebas de que compartir experiencias negativas con otros miembros del grupo aumenta la fusión de la identidad.
Desde el punte vista deesarrollo, Gaviria, Ferreira, Martínez y Whitehouse (2015) realizaron un par de estudios con niños de entre 6 y 12 años de edad para examinar cómo y cuándo se desarrolla la fusión de la identidad en la infancia. Ebjetivo principal fue identificar el nivee desarrollo necesarie la identidad social y personael niño como para que pueda producirse una fusión de la identidad. Los resultados mostraron que los niños son capaces de sentir una conexión intensa con su grupo y de estar dispuestos al sacrificio por dicho grupo, pero al no haber desarrollado totalmente su identidad personal solo muestran una especie de «protofusión», cuya característica principal es el importante papee los lazos relacionales, que funcionan como una gran fuerza que les conecta con el grupo. En conclusión, es imprescindible desarrollar esta línea de investigación sobre la fusión de la identidad, puesto que conocer los procesos que causan la fusión ayudará a entender mejor este sentimiento y a elaborar estrategias para evitarlo cuando sus consecuencias sean negativas (como el extremismo radical) o fomentarlo cuando sus consecuencias sean positivas (como comportamientos igualmente extremos, pere ayuda).
Ahora bien, si volvemos al ejemplo con el que empezamos nuestro trabajo, alguien podría argumentar que el terrorista deaesh no mató a su madre por su conexión visceral con dicho grupo extremista, o al menos no solamente por eso, sino porque sintió amenazadas sus creencias, por ejemplo, la interpretación que hace el Estado Islámice la Sharia ey islámica. En ese caso, este individuo se habría comportade un modo extremo por defender un valor, en lugar de por el grupo al que pertenecía (aunque podría ser por ambas cosas, como veremos más adelante en el modele los actores devotos ). Esto nos da pie al siguiente epígrafe, en el que se recoge una teoría que plantea que cuando existe un compromiso tal con un valor que este llega a considerarse sagrado, los comportamientos en pre su defensa son tan extremos o más que cuando se trata de defender a un grupo.
El vínculo visceral con un valor: la teoría de los valores sagrados
Los seres humanos tenemos una característica psicológica muy especial: normalmente no soportamos la tensión que provoca la disonancia entre nuestro sistema de creencias, emociones y comportamientos ( Festinger, 1957 ), motivo por el cuaas personas en general no nos embarcamos en conductas socialmente censurables hasta que no somos capaces de justificar ante nosotros mismos la moralidae nuestras acciones ( Bandura, 1990 ). Todos deseamos actuar en consonancia con lo que creemos y con lo que somos (o creemos ser), y en ese sentidos yihadistas no son diferentes. No podemos obviar que una de las ideas que inspira y legitima a las personas que actúan en nombre deaesh es la propia búsqueda de sentido vital y la identidad que ofrece el perseguir y luchar por una causa que se presenta, para ellos al menos, como gloriosa y justa ( Atran, 2015 ). Una causa sagrada por la que merece la pena incluso morir y matar si es necesario.
La forma en la que nos enfrentamos a ciertas ideas o creencias es fundamental para entender —y evitar así si resulta posible— el comportamiento extremo. En ocasiones las personas creemos que un cosa (como un simple troze tierra) o una idea (coma liberta un determinado sistema político) no es una mera preferencia que puede ser cuantificada, negociada o intercambiada por cualquier causa materia inmaterial, sino un valor sagrado que debe respetarse de forma absoluta y protegerse por encima de todo y de todos ( Ginges y Atran, 2014 ). Cuando una preferencia por algo se transforma en valor sagrado se convierte en un imperativo moral que tiene su propio valor intrínseco y que lo hace incomparable con otro tipe valores o simplemente imposible de intercambiar por cualquier bien materia inmaterial ( Tetlock, Kristel, Elson, Green y Lerner, 2000 ). Los valores sagrados son aquellos que un individu un grupo tratan implícita o explícitamente como si poseyesen un significado trascendenta infinito, donde se descarta cualquier tipe comparación, intercambi mezcla con valores mundanos y con los que tienen un compromiso absoluto e inviolable ( Tetlock, 2003; Tetlock et al., 2000 ). Los valores sagrados tienen un efecto esencial en nuestra toma de decisiones, porque además son una parte centrae nuestra identidad personal y social, parte intrínseca de quienes somos ( Atran y Ginges, 2012, 2015; Sheikh, Ginges y Atran, 2013 ).
Incluso aunque el contenide los valores sagrados cambie, dependiende la cultura, y se haya ido alterando a large la historia, todas las sociedades humanas consideran que hay cuestiones que son absolutamente sagradas. Otra característica que parecemos compartir los seres humanos es la tendencia a proteger nuestros valores sagrados a toda costa. Según el modele protección de los valores sagrados ( Tetlock, 2003; Tetlock et al., 2000 ), solemos utilizar ciertas estrategias psicológicas para proteger nuestros valores sagrados cuando se ven amenazados. Una de estas estrategias es conocida como ultraje moral , que consiste básicamente en experimentar una aversión que tiene componentes cognitivos (p. ej., asignar rasgos negativos extremos como crueldad, maldad, ignorancia), afectivos (p. ej., sentir ira esprecio) y comportamentales (p. ej., apoyar normas para sancionar) cuandas personas descubren que miembros de su comunidad han comprometidos valores sagrados y de alguna manera los han violado.
Para entender esta idea podemos tener en cuenta un dilema tabú presentado en una investigación por Tetlock et al. (2000) , donde se planteaba un escenario en el que el responsable de la administración de un hospital se ve en la tesitura de salvar la vida de un niñe 5 años que necesita urgentemente un trasplante de hígado que cuesta un millón de dólares o gastar ese misminero en mejoras para el hospital (p. ej., comprar mejor equipamiento, subir los salarios para contratar a médicos mejores, etc.). En eilema se hace además referencia a que hay pocos donantes de órganos. Como vemos, en este dilema se plantea un intercambio tabú entre un valor sagrado (la vida de un niño) y un valor mundano/secular (mejoras para un hospital). Ante este dilema, las personas consideraban que era un ultraje morae primer orden que el responsable del hospital creyese que era difícil elegir entre el valor secular y el valor sagrado, y además lo resolviese a favor del valor secular. Cuandos valores sagrados se ven amenazados, las personas también pueden poner en práctica la estrategia de purificación moral , es decir, llevar a cabo actos simbólicos que reafirmen su compromiso con el valor sagrado. Ante el intercambio tabú presentado anteriormente (la vida de un niñ mejoras para un hospital) los participantes estuvieron más dispuestos a ser voluntarios en una campaña de donación de órganos como prueba de purificación moral, es decir, de su compromiso con el valor sagrado (en este caso, la vida de un niño).
Quizás una pregunta que acude a nuestra mente sea: ¿por qué el respeto a los valores sagrados debería ser tan absoluto e inviolable? En efecto, parece que el procesamiento relacionado con los valores sagrados tiene mucho que ver con lo que percibimos como moralmente correcto ( Baron y Spranca, 1997; Berns et al., 2012; Tetlock, 2003 ). De hecho, en un experimento ( Berns et al., 2012 ) en el que se pagaba dinero para persuadir a los participantes para que vendiesen sus valores, se comprobó que aquellos que las personas se negaban a vender (sus valores sagrados) se asociaban con un incremente la actividad cerebral en zonas específicas relacionadas con la recuperación de reglas deontológicas (con lo que debe o nebe hacerse). Por lo tanto, parece que los valores sagrados afectan al comportamiente una forma muy concreta, a través de la recuperación y el procesamiente reglas deontológicas (lo que se percibe como moralmente correcto) y no a través de la evaluación utilitaria de costes y beneficios ( Berns et al., 2012).
Aunque a largel tiempo en muchas disciplinas ha predominado (y aún hoy ocurre) la idea de que los seres humanos somos seres racionales que tomamos decisiones teniendo en cuenta un balance preciso entre los costes y beneficios, la historia y la experiencia ponen en entredicho esta concepción ( Atran, Medin y Ross, 2005; Ginges, 1997 ). Muchas de las decisiones más importantes que tomamos se ven guiadas precisamente por nuestras creencias culturales sobre lo que está bien y lo que está mal (p. ej., nuestros valores sagrados) más que por un análisis utilitarista de las consecuencias ( Baron y Spranca, 1997; Tetlock, 2003 ). Esta cuestión tiene especial importancia en situaciones de conflicto intergrupal, puesto que cuandas personas interpretan ciertas cuestiones centrales en un conflicte esta naturaleza como valores sagrados (a los cuales les es imposible renunciar), se comportan más como actores devotos —proceso en el que interviene la conexión con un valor y con el grupo, como veremos en el siguiente epígrafe— que como actores racionales ( Atran, Axelrod y Davis, 2007; Ginges, Atran, Medin y Shikaki, 2007 ).
En la última década, un grupo multidisciplinar de investigadores ha publicado un gran númere trabajos en los que se aplica el modele los valores sagrados al comportamiento extremo (p. ej., Atran, 2003; Atran y Axelrod, 2008; Atran et al., 2007; Atran y Ginges, 2012 ). Estos autores han desarrollado un paradigma experimental aplicado a contextos reales para analizar cómo se comportan las personas cuando se les ofrece un incentivo material que compromete sus valores sagrados. Para ello planteaban escenarios hipotéticos pero realistas que implicaban valores que eran centrales para los participantes cuyos grupos se veían envueltos en enfrentamientos políticos, como el conflicto árabe-israelí ( Ginges et al., 2007; Sheikh et al., 2013 ). En sus estudios comprobaron que los intentos de negociación que ofrecen incentivos materiales (p. ej., dinero) cuandos valores sagrados están en juego tienen un efecto contraproducente ; en particular, se incrementa el ultraje moral y el apoyo a la acción violenta ( Ginges et al., 2007; Ginges y Atran, 2014 ).
Las personas que mantienen valores sagrados, además, son bastante resistentes a la presión social, y su percepción psicológica de la distancia temporae eventos asociados con los valores sagrados es más reducida (perciben esos eventos como más cercanos en el tiempo). Por ejemplo, aquellos participantes palestinos que consideraban eereche retorno como sagrado (eran actores devotos) sentían que el Nakba («catástrofe» esastre que se refiere al éxodo palestino como consecuencia de la fundación del Estade Israel en 1948) estaba más cercano en el tiempo que el fin de la Segunda Guerra Mundial en comparación con aquellos que no consideraban eereche retorno como sagrado ( Sheikh et al., 2013 ). Además, aquellos individuos que mantienen valores sagrados parecen estar menos dispuestos a aprovechar beneficios personales para intercambiar o abandonar sus valores, incluso si esos beneficios implican otros valores también importantes. Por ejemplo, los actores devotos (aquellos que mantenían ciertas cuestiones ligadas al conflicto como sagradas) se negaban más a la idea de no unirse a la resistencia —en case que hubiese una invasión por parte de Israel— a cambie ir a formarse en el extranjero (para servir posteriormente mejor a su país), algo que, si bien resultaba importante, no era sagrado ( Sheikh et al., 2013).
Los procesos anteriores ponen de manifiesta influencia de los valores sagrados en la forma en que las personas toman decisiones. Así, cuando un conflicteterminado pone en juego, o incluso enfrenta, los valores sagrados de diferentes grupos, estos valores contribuyen a la perpetuación de dicho conflicto ( Sheikh et al., 2013 ). Sin embargo, realizar concesiones simbólicas (que aparentemente carecen de beneficio material pero que reconocen los valores detro) —como reconocer eerecho histórico y legítime un pueblo a la tierra— puede abrir el camino para resolver conflictos aparentemente irreconciliables ( Ginges y Atran, 2014 ). Nbstante, eector se dará cuenta de lifícil que esto puede llegar a resultar en determinadas ocasiones.
Hasta aquí, por el resumen que hemos realizade la teoría de la fusión de la identidad y de los valores sagrados, puede comprobarse cóma fusión de la identidad se ha investigado principalmente en contextos controlados y de laboratorio con escasas excepciones (ver, p. ej., Whitehouse, McQuinn, Buhrmester y Swann, 2014 ). Sin embargo, el énfasis en el estudie los valores sagrados ha estado más en las aplicaciones a contextos reales, en particular a situaciones de conflicto. A continuación presentaremos un reciente modelo teórico que aúna las dos teorías que hemos analizado, la fusión de la identidad y de los valores sagrados, para afrontar la investigación sobre comportamiento violento grupal. Este modelo presta, además, especial atención a una perspectiva metodológica combinada, donde los estudios de laboratorio y de campo se complementan para realizar un estudio más exhaustivo posible del fenómeno.
Modele los actores devotos
¿Por qué luchan los revolucionarios en causas aparentemente perdidas o calificadas externamente de inmorales? ¿Por qué luchan los yihadistas? ¿Qué les mueve a estar dispuestos a arriesgar absolutamente todo, incluso a hacer daño a su familia? Las personas ciertamente luchan por sus ideales, por perseguir una causa en la que creen profundamente y que define su identidad. Sin embargo, en muchas ocasiones las personas nuchan tanto por una idea abstracta, sino guiadas más bien por la unión, la fraternidad y el compromiso que sienten por sus camaradas y compañeros de lucha ( McManus, 2003 ). De hecho, parece que la ideología no es tan importante como pensamos y es más eiderazg la lealtad al propio grupo esencial a la hora de conformar ese poderoso «espíritu guerrero» que puede ganar batallas que se daban por perdidas ( Smith, 1983 ). Muy probablemente, las personas realmente luchan y mueren por una causa, pero también por sus camaradas (para una mayor reflexión, ver Atran, Sheikh y Gomez, 2014b).
Esta idea resulta coherente, ya que existe evidencia que muestra que cuandas personas fusionadas perciben que los miembros del grupo comparten atributos físicos y valores están más dispuestas a proyectar lazos familiares comunes de pequeños grupos a grupos más extensos como el país, lo cual incrementa la disposición a luchar y morir por ese grupo más extenso ( Swann et al., 2014a ). Recientemente también se ha observado, como comentábamos anteriormente, que revolucionarios libios durante el conflicte 2011 estaban fuertemente fusionados tanto con su batallón local como con su familia. Sin embargo, existían diferencias interesantes, dependiende si eran o no combatientes. Casi la mitae los combatientes de primera línea —el 45%, frente a solo al 28% de los no combatientes— reconocieron sentirse principalmente fusionados con su batallón más que con su familia (i.e., este tipe lazos y vínculos familiares puede llevar a los combatientes a hacer sacrificios extremos por su grupo), y además se sentían personalmente más comprometidos con los objetivos de la revolución que los no combatientes ( Whitehouse et al., 2014).
Un grupe investigadores formado por quienes iniciaron y desarrollaron la teoría de la fusión de la identidad y por quienes han trabajado y aplicado a situaciones de conflicto internacional el modele los valores sagrados han comenzado a desarrollar el modele los actores devotos . Este modelo ha demostrado empíricamente por vez primera que los valores sagrados y la fusión de la identidad pueden interactuar para producir la disposición a hacer sacrificios costosos para defender una causa y/o a un grupo cuando algune estos factores se ve amenazado ( Atran, Sheikh y Gomez, 2014a; Atran et al., 2014b; Sheikh, Gómez y Atran, 2016 ).
El marco teórice los actores devotos ha sidesarrollado por un grupe investigadores y asesores políticos de ARTIS Research ( http://artisresearch.com ), un grupe investigación científica multidisciplinar dedicado a mejorar la comprensión de la violencia política y cultural así comos mecanismos psicológicos que subyacen a la disposición de los seres humanos a hacer sacrificios costosos por una causa ( Atran et al., 2007; Atran et al., 2014a; Atran y Ginges, 2015 ). La hipótesis del actor devoto, como se ha visto anteriormente, mantiene que las personas estarán dispuestas a proteger valores sagrados o moralmente muy importantes para su comunidad haciendo sacrificios costosos y comportándose de un modo extremo como matar y morir, especialmente cuando tales valores forman parte intrínseca de la identidael grupo; en definitiva, definen quiénes somos. De esta forma, cuandas personas acaban actuando como actores devotos para proteger sus valores sagrados, su comportamiento es difície predecir porque no se basa en un análisis racional y utilitarista de los costes y consecuencias, sino en un compromiso absoluto con lo que es moralmente correcto, sin importar los riesgos que implique ni las recompensas que puedan conseguirse. Este marco teórico integra actualmente dos líneas de investigación hasta ahora independientes, los valores sagrados ( Ginges et al., 2007 ) y la fusión de la identidad ( Swann et al., 2012 ). Se propone así que los valores sagrados pueden motivar el comportamiento extremo, especialmente en la medida en la que estos valores se combinan con la fusión con un grupo que los comparte ( Atran et al., 2014a).
El modelel actor devoto ha encontrado evidencia empírica en una serie de trabajos realizados recientemente ( Atran et al., 2014a; Sheikh et al., 2016 ). En estos estudios, participantes de dos barrios previamente relacionados con militancia y apoyo a la Yihad (Jemaa Mezuak en Tetuán y Sidi Moumen en Casablanca) indicaron el nivee fusión que tenían con un grupe amigos al que considn como hermanos o hermanas sin ser realmente de su familia. Por otra parte, expresaron también su nivee aceptación con la idea de retrasar la plena imposición de la Sharia en su país. Aquellos que se negaban rotundamente a esa idea sin importar lo grandes que fueran los beneficios eran los que los investigadores determinaron que consideraban la Sharia como valor sagrado. Finalmente, los participantes indicaron en qué medida estarían dispuestos a realizar sacrificios costosos y a participar en acciones extremas para implementar la ley islámica o Sharia. Los resultados indicaron que aquellos que consideraban la Sharia como valor sagrado y estaban además fusionados con un grupe amigos que sentían como si fuesen de su familia eran los que estaban extraordinariamente más dispuestos a hacer sacrificios costosos por la Sharia.
Este resultado se replicó en un entorne laboratorio, más controlado, con participantes españoles a los que se destacaba una amenaza (se les pedía que escribiesen sobre lo que pensaban acerca de la interpretación de la Sharia que hacían los seguidores del Estado Islámic Al Qaeda) en comparación con una condición sin amenaza. Aquellos que estaban fuertemente fusionados con un grupe amigos que consideraban familia y pensaban además que la democracia es un valor sagrado mostraban en general una mayor disposición a realizar sacrificios costosos por la democracia.
Actualmente este grupe investigadores está llevando a cabo una serie de investigaciones de laboratorio y de campo en zonas de conflicto armado para profundizar en el modele los actores devotos. Los principales objetivos son explorar los procesos involucrados en estos comportamientos extremistas para entenderlos y, en la medida de lo posible, evitarlos en el futuro y saber cómo controlarlos o erradicarlos a corto y a medio plazo.
Hasta aquí hemos descrito y analizados teorías, así como un modelo que combina ambas, que en la última década se han revelado como probablemente las más fructíferas en la investigación no meramente descriptiva sobre extremismo. Como hemos visto, se han centrado en su poder de predicción, en los factores que modulan, bien mediand moderando, sus efectos sobre el comportamiento extremo. Escasa o casi nula ha sida investigación sobre sus causas, lo que abre una necesidad para el futuro cercano. Pero más relevante aún que estudiar las causas de la fusión es conocer sus implicaciones de cara a la evitación, la reducción a erradicación tantel proceso en sí —por ejemplo, que se evite la formación de la fusión con un grup la sacralización— come sus consecuencias cuando estas son negativas. Sobre esto hablaremos en el próximo epígrafe.
Propuestas para la evitación, reducción y/o erradicación del extremismo
La integración de las teorías expuestas anteriormente no solo es importante para comprender y predecir el comportamiento extremo, sino que también nos dota de claves importantes para identificar futuras vías para la desradicalización. Dado que, como hemos visto, las personas pueden estar dispuestas a luchar y morir tanto por un grupo como por un valor, y especialmente su comportamiento extremo se dispara cuando ambos procesos interactúan como consecuencia de una amenaza al grup al valor, los procesos de abandone la violencia política deben tener en cuenta la desvinculación del grupo y la desradicalización de las ideas. Para Horgan (2008) es importante distinguir entre desradicalización (un cambio actitudinal) y desconexión esvinculación (un cambio comportamental), puesto que dejar atrás el terrorismo —esvincularse de un grupo radical— no implica que la persona abdique de sus ideas ni que se sienta arrepentida. De hecho, este autor destaca que inclusos individuos que dejan el grupo radical (se desvinculan) continúan muchas veces radicalizados en sus ideas.
Desde la teoría de la fusión de la identidad se han propuesto —que no probado hasta la fecha— algunas estrategias fundamentales que pueden contribuir a la defusión con el grupo ( Gómez y Vázquez, 2015 ). La idea fundamental tiene que ver con la desactivación de los procesos que mantienen esa conexión visceral con el grupo. ¿Qué pasaría si lo que nos une de esa forma tan profunda desapareciera? ¿Si las personas en las que más confiamos nos traicionasen, si ya no percibiésemos que compartimos esos lazos familiares únicos, si sintiésemos que ya no podemos hacer nada por los nuestros o estos abandonasen los ideales y los valores que nos unen? Desde la fusión de la identidad, una posible reducción del comportamiento extremo por el grupo podría explicarse debido a una ruptura de los lazos relacionales (si la persona siente roto el vínculo y el sentimiento familiar que le une al grupo, por ejemplo al percibir una traición; Swann et al., 2012 ) a percepción de la agencia personal (si la persona siente que el grupo ya no necesita, que no puede hacer nada para mejorar las condiciones grupales efender a su grupo). Por otra parte, la percepción de que el grupo ha cambiado y ya no persigue sus valores fundamentales podría también contribuir al abandonel grupo radical ( Swann et al., 2012 ). Esta última sugerencia conecta con la idea de valores sagrados. Algunas personas se unen a grupos radicales para perseguir y defender ciertas ideas que consideran fundamentales para su identidad. Si el grupo cambia dichos valores o el individuo percibe que los medios utilizados por el grupo van en contra de esos valores fundamentales, puede buscar caminos alternativos para alcanzarlos, como, por ejemplo, cambiar de grupo.
Aunque estar fusionado con un grupo radical no es lo mismo que estar identificado con él, la literatura sobre desidentificación también puede aportar claves importantes. En general, se han identificadiferentes predictores de la des-identificación, como el sentimiente rechaz discriminación ( Jasinskaja-Lahti, Liebkind y Solheim, 2009; Verkuyten y Yildiz, 2007 ), una ausencia de apoyo grupal y también ausencia de solidarida compromiso entre los miembros del grupo ( Becker, Tausch, Spears y Christ, 2011 ), percepción de un conflicte valores entre la persona y el grupo ( Elsbach y Bhattacharya, 2001; Glasford, Pratto y Dovidio, 2008 ) o una pérdida de confianza en el grupebido a un tratamiento injusto ( Restubog, Hornsey, Bordia y Esposo, 2008 ).
Becker y Tausch (2014) han introducido recientemente un modelo con varios componentes de desidentificación, en el que sugieren tres dimensiones principales: eesapego, la insatisfacción y la disimilitud. Eesapego es un componente muy emocional y se refiere a un estado motivacional negativo que incluye sentimientos de alienación, lo que puede ocurrir cuanda persona percibe un conflicto moral con el grupo. La insatisfacción se refiere a una evaluación negativa de la pertenencia al grupo y puede relacionarse con experiencias negativas de rechaz discriminación. La disimilitud, por su parte, implica que el individuo se percibe comiferente a otros miembros del propio grupo.
Diferentes autores desde otras perspectivas teóricas han identificado varios factores que pueden contribuir o favorecer la desvinculación de un grupo radical. Por ejemplo, Horgan (2008) destaca dos conjuntos de factores que favorecen la desvinculación del grupo radical: los factores psicológicos y los factores físicos. Entre los factores psicológicos o emocionales podríamos destacar los sentimientos negativos que pueden resultar de experiencias negativas asociadas con la pertenencia al grupo (presión, ansiedad), un cambio en las prioridades o una sensación creciente de desilusión con los objetivos perseguidos os medios para alcanzarlos. Entre los factores físicos se podría destacar el cambio forzade roentrel grup el incremente la actividad en otro rol, o también ser rechazado por el propio movimiento.
Bjørgo (2005) , por su parte, considera que hay diferentes factores que se combinan para contribuir a la decisión de dejar el grupo radical, algunos de los cuales «empujan hacia fuera» del grupo y otros «tiran desde fuera». Los factores de «empuje» hacia fuera se refieren a aquellas circunstancias negativas que hacen que permanecer en el grupo sea menos atractivo y placentero (p. ej., pérdida de fe en la ideología y las políticas del grupo, una creciente desilusión con las actividades internas del grupo, la ausencia de lealtad real entre los miembros del grupo, desconfianza entre los miembros etc.). Los factores que «tiran» desde fuera se refieren a las fuerzas que atraen a la persona hacia una alternativa más gratificante ajena al grupo radical (p. ej., anhele una vida normal, desee establecer relaciones sentimentales y una familia, una nueva estructura de creencias o ideología más atrayente).
Otros autores ( Demant, Slootman, Buijs y Tillie, 2008 ) hacen una distinción entre diferentes tipos de factores que pueden llevar a la desradicalización: normativos (la ideología ya no es atractiva), afectivos (los aspectos sociales del grupo ya no son satisfactorios) y de continuación/prácticos (cuandas circunstancias prácticas no son satisfactorias).
Recientemente, Harris (2015) ha propuesto un modelo en el que la discrepancia entre la pertenencia al grupo y el autoconcepto es la cuestión central para la experiencia de desvinculación de un grupo radical. Esta teoría de desvinculación psicológica parte de la percepción de una amenaza al yo. En cuanto a las causas que pueden desencadenar esa primera amenaza, se pueden dividir en dos categorías: las que se producen dentrel grupo (rupturas de relaciones íntimas dentrel grupo, cambio en las dinámicas grupales, conflicte roles) y las de fuera del grupo (pareja o familia, la estigmatización y presión de las instituciones).
Muchos de los factores anteriores que pueden contribuir a la desvinculación del grupo terrorista son coherentes con las ideas defendidas por la teoría de la fusión de la identidad y de los valores sagrados sobre los factores que en estos casos fomentan y mantienen la conexión visceral con el grup el valor. Si deseamos establecer caminos para eifícil procese la desradicalización, tendremos que incidir en varios niveles (cognitivo y emocional) en los procesos que se establecen tanto con el grupo radical como con las creencias y valores.
Conclusiones y discusión
Formar parte de un grupo radical y comportarse —en ciertos casos de modo realmente salvaje— consecuentemente es un fenómeno complejo que implica, entre otras cuestiones, una profunda unión con un grupo y la defensa absoluta de unas ideas. Aunque la conducta violenta de algunos grupos terroristas pueda resultarnos incomprensible, existen procesos psicosociales que nos ayudan a explicarla y predecirla. Por una parte, la teoría de la fusión de la identidad analiza cóma conexión viscerae un individuo con un grupo puede predecir el comportamiento extremo para defender a ese grupo, por ejemplo a través de los lazos relacionales que se establecen con los miembros del grupo. Por otra parte, la teoría de los valores sagrados analiza cómas personas actuamos más como actores devotos que como actores racionales cuando tomamos decisiones que implican valores que consideramos sagrados, a los cuales no renunciaríamos por nada del mundo y por los cuales seríamos capaces de hacer sacrificios altamente costosos. El modele los actores devotos propone que ambos procesos pueden interactuar generando así un comportamiento extremesproporcionado. Estas perspectivas pueden darnos claves importantes para la intervención y facilitar la desvinculación de grupos radicales. Entre los factores que pueden contribuir a la desvinculación y desradicalización se hace especial énfasis en la insatisfacción dentrel propio grupo como consecuencia de un deteriore las relaciones interpersonales ien de una sensación de desilusión con la ideología y las creencias defendidas por el grup sus medios para alcanzarlas.
En este trabajo hemos descrito resumidamente dos líneas teóricas y un modelo recientes —la fusión de la identidad, los valores sagrados y el modele los actores devotos, respectivamente— que tratan de entender el porqué del heche que un individuo se sacrifique por un grup valor y mate a quién sea y a cuantas personas sea necesario para defenderlos. Existen nbstante otros investigadores que mediante el trabaje camp utilizandtras metodologías tratan también de comprender este fenómeno y explicar un comportamiento tan terrible que probablemente en el tiempo que ha tardado eector en leer este trabajo haya causado una o varias víctimas. Aunque nuestreseo hubiera sido que investigaciones como estas nunca se realizasen y que trabajos como este no se escribiesen, porque significaría que este tipe violencia no existiría, nos queda al menos la esperanza de que todo el esfuerze quienes indagamos en este proceso sirva al menos para salvar una vida. Entonces el esfuerzo habrá merecida pena.
Conflicte intereses
Los autores de este artículeclaran que no tienen ningún conflicte intereses.
Financiación
Proyecto I+D+i financiado por el Ministerie Economía y Competitividad (PSI2012-30921) concedido al primer autor. Ayuda para contratos Juan de la Cierva-formación (FJCI-2014-22993) concedida a la segunda autora. Proyecte investigación financiado por la UNED (2013-004-UNED-PROY) concedido a la tercera autora.
Bibliografía
Atran, 2003 ; ; S. Atran Genesis of suicide terrorism Science 299 5612 2003 1534-9 Medline DOI
Atran, 2015 ; ; S. Atran Mindless terrorists? The truth about Isis is much worse The Guardian 2015
Atran y Axelrod, 2008 ; ; S. Atran R. Axelrod Reframing sacred values Negotiation Journal 24 2008 221-46
Atran et al., 2007 ; ; S. Atran R. Axelrod R. Davis Sacrearriers to conflict resolution Science 317 5841 2007 1039-40 Medline DOI
Atran y Ginges, 2012 ; ; S. Atran J. Ginges Religious and sacred imperatives in human conflict Science 336 6083 2012 855-7 Medline DOI
Atran y Ginges, 2015 ; ; S. Atran J. Ginges Devoted actors and the moral foundations of intractable inter-group conflict The Morarain MIT Press Cambridge, MA 2015 69-86
Atran et al., 2005 ; ; S. Atran D.L. Medin N.O. Ross The cultural mind: Environmentaecision making and cultural modeling within and across populations Psychological Review 112 2005 744-6 Medline DOI
Atran et al., 2014a ; ; S. Atran H. Sheikh A. Gomez Devoted actors sacrifice for close comrades and sacred cause Proceedings of the National Academy of Sciences of the United States of America 111 2014 17702-3 Medline DOI
Atran et al., 2014b ; ; S. Atran H. Sheikh A. Gomez For cause and comrade: Devoted actors and willingness to fight Cliodynamics 5 2014 41-57
Bandura, 1990 ; ; A. Bandura Mechanisms of moraisengagement Origins of Terrorism: Psychologies, Ideologies, Theologies, States of mind Cambridge University Press Cambridge 1990 161-91
Baron y Spranca, 1997 ; ; J. Baron M. Spranca Protected values Organizationaehavior and Human Decision Processes 70 1997 1-16
Becker y Tausch, 2014 ; ; J.C. Becker N. Tausch When group memberships are negative: The concept, measurement anehavioral implications of psychologicaisidentification Self and Identity 13 2014 294-321
Becker et al., 2011 ; ; J.C. Becker N. Tausch R. Spears O. Christ Committeis(s)idents: Participation in radical collective action fosters disidentification with the broader in-group but enhances political identification Personality and Social Psychology Bulletin 37 2011 1104-16 Medline DOI
Berns et al., 2012 ; ; G.S. Berns E. Bell C.M. Capra M.J. Prietula S. Moore B.... Anderson S. Atran The price of your soul: Neural evidence for the non-utilitarian representation of sacred values Philosophical Transactions of the Royal Society B — Biological Sciences 367 1589 2012 754-62
Bjørgo, 2005 ; ; T. Bjørgo Reducing recruitment and promoting disengagement from extremist groups: The case of racist sub-cultures A future for the Young: Options for Helping Middle Eastern Youth Escape the Trap of Radicalization RAN National Security Research Division Santa Monica, CA 2005 1-30
Buhrmester et al., 2014 ; ; M.D. Buhrmester W.T. Fraser J. Lanman H. Whitehouse W.B. Swann Jr. When terror hits home: Identity Fused Americans who saw Boston bombing victims as ‘family’ provided aid Self and Identity 14 2014 253-70
Buhrmester et al., 2012 ; ; M.D. Buhrmester A. Gómez M.L. Brooks J.F. Morales S. Fernandez W.B. Swann Jr. My group's fate is my fate: Identity fused Americans and Spaniards link personaife quality tutcome of ‘08 elections Basic and Applied Social Psychology 34 2012 527-33
Demant et al., 2008 ; ; F. Demant M. Slootman F. Buijs J. Tillie Decline anisengagement: An Analysis of Processes of Deradicalisation 2008
Elsbach y Bhattacharya, 2001 ; ; K.D. Elsbach C.B. Bhattacharya Defining who you are by what you’re not: Organizationaisidentification and the National Rifle Association Organizational Science 12 2001 393-413
Festinger, 1957 ; ; L. Festinger A Theory of Cognitive Dissonance 1957
Gaviria et al., 2015 ; ; E. Gaviria C. Ferreira M. Martínez H. Whitehouse Identity and the developmentarigins of fusion: An exploratory approach [La identidad y los orígenes de la fusión en eesarrollo: un enfoque exploratorio] International Journaf Social Psychology 30 2015 531-62
Ginges, 1997 ; ; J. Ginges Deterring the terrorist: A psychological evaluation of different strategies for deterring terrorism Terrorism and Political Violence 9 1997 170-85
Ginges y Atran, 2014 ; ; J. Ginges S. Atran Sacred values and cultural conflict Oxford University Press M.J.GelfandC.Y.ChiuY.Y.Hong New York 2014
Ginges et al., 2007 ; ; J. Ginges A. Atran D. Medin K. Shikaki Sacreounds on rational resolution of violent political conflict Proceedings of the National Academy of Sciences 104 2007 7357-60
Glasford et al., 2008 ; ; D.E. Glasford F. Pratto J.F. Dovidio Intragroup dissonance: Responses to ingroup violation of personal values Journaf Experimental Social Psychology 44 2008 1057-64
Gómez et al., 2011a ; ; A. Gómez M.L. Brooks M.D. Buhrmester A. Vázquez J. Jetten W.B. Swann Jr. On the nature of identity fusion: Insights into the construct and a new measure Journaf Personality and Social Psychology 100 2011 918-33 Medline DOI
Gómez et al., 2011b ; ; A. Gómez J.F. Morales S. Hart A. Vázquez W.B. Swann Jr. Rejected and excluded forevermore, but even more devoted: Irrevocable ostracism intensifies loyalty to the group among identity fused persons Personality and Social Psychology Bulletin 37 2011 1574-86 Medline DOI
Gómez y Vázquez, 2015 ; ; A. Gómez A. Vázquez The power of ‘feeling one’ with a group: Identity fusion and extreme pro-group behaviours International Journaf Social Psychology 30 2015 481-511
Greene et al., 2000 ; ; K. Greene M. Krcmar L. Walters D. Rubin J. Hale Targeting adolescent risk-taking behaviors: The contribution of egocentrism and sensation-seeking Journaf Adolescence 23 2000 439-61 Medline DOI
Harris, 2015 ; ; K.J. Harris Leaving Ideological Social Groups Behind: A Grounded Theory of Psychologicaisengagement (doctoraissertation) 2015
Horgan, 2008 ; ; J. Horgan De-radicalization or disengagement? Perspectives on Terrorism 2 4 2008 3-9
Jasinskaja-Lahti et al., 2009 ; ; I. Jasinskaja-Lahti K. Liebkind E. Solheim To identify or not to identify? Nationaisidentification as an alternative reaction to perceived ethnic discrimination Applied Psychology 58 2009 105-28
Jiménez et al., 2015 ; ; J. Jiménez A. Gómez M.D. Buhrmester A. Vázquez H. Whitehouse W.B. Swann Jr. The dynamic identity fusion index: A new continuous measure of identity fusion for web-based questionnaires Social Science Computer Review 34 2016 215-28
Jong et al., 2015 ; ; J. Jong H. Whitehouse C. Kavanagh J. Lane Shared negative experiences lead to identity fusion via personal reflection PloS one 10 12 2015 e0145611 Medline DOI
McManus, 2003 ; ; J. McManus The Deadly Brotherhood: The American Combat Soldier in World War II 2003
RIE, 2016 ; ; Real Instituto Elcano (2016). Barómetre enero. Recuperade: h t t p & # 5 8 ; & # 4 7 ; & # 4 7 ; w w w & # 4 6 ; r e a l i n s t i t u t o e l c a n o & # 4 6 ; o r g & # 4 7 ; w p s & # 4 7 ; p o r t a l & # 4 7 ; r i e l c a n o & # 4 7 ; c o n t e n i & # 6 3 ; W C M & # 9 5 ; G B AL_CONTEXT=/elcano/elcano_es/barometro/oleadabrie37
Restubog et al., 2008 ; ; S.L.D. Restubog M.J. Hornsey P. Bordia S.R. Esposo Effects of psychological contract breach on organizational citizenship behavior: Insights from the group value model Journaf Management Studies 45 2008 1277-400
Sheikh et al., 2013 ; ; H. Sheikh J. Ginges S. Atran Sacred values in the Israeli-Palestinian conflict: Resistance to social influence, temporaiscounting, and exit strategies Sociability, Responsibility, and Criminality: From Lab taw 1299 2013 11-24
Sheikh et al., 2016 ; ; H. Sheikh A. Gómez S. Atran Empirical evidence for the Devoted Actor Model Current Anthropology 57 13 2016
Smith, 1983 ; ; R. Smith Why soldiers fight: Part I. Leadership, cohesion, and ‘fighter spirit’ Quality and Quantity 18 1983 1-32
Swann et al., 2014a ; ; W.B. Swann Jr. M.D. Buhrmester A. Gómez J. Jetten B. Bastian A. Vázquez What makes a group worth dying for? Identity fusion fosters feelings of familial ties, promoting self-sacrifice Journaf Personality and Social Psychology 106 2014 912-26 Medline DOI
Swann et al., 2014b ; ; W.B. Swann Jr. A. Gómez M.D. Buhrmester L. López-Rodríguez J.A. Jiménez A. Vázquez Contemplating the ultimate sacrifice: Identity fusion channels pro-group affect, cognition and moraecision making Journaf Personality and Social Psychology 106 2014 713-27 Medline DOI
Swann et al., 2010a ; ; W.B. Swann Jr. A. Gómez J. Dovidio S. Hart J. Jetten Dying and killing for one's group: Identity fusion moderates responses to intergroup versions of the trolley problem Psychological Science 21 2010 1176-83 Medline DOI
Swann et al., 2010b ; ; W.B. Swann Jr. A. Gómez C. Huici F. Morales J.G. Hixon Identity fusion and self-sacrifice: Arousal as catalyst of pro-group fighting, dying and helping behavior Journaf Personality and Social Psychology 99 2010 824-41 Medline DOI
Swann et al., 2009 ; ; W.B. Swann Jr. A. Gómez C. Seyle C. Huici F. Morales Identity fusion: The interplay of personal and social identities in extreme group behavior Journaf Personality and Social Psychology 96 2009 995-1011 Medline DOI
Swann et al., 2015 ; ; W.B. Swann Jr. A. Gómez A. Vázquez G.A. Guillamón S. Segovia B. Carrillo Fusion with the cross-gender group predicts genital sex reassignment surgery Archives of Sexuaehavior 44 2015 1313-8 Medline DOI
Swann et al., 2012 ; ; W.B. Swann Jr. J. Jetten A. Gómez H. Whitehouse B. Bastian When group membership gets personal: A theory of identity fusion Psychological Review 119 2012 441-56 Medline DOI
Tetlock, 2003 ; ; P.E. Tetlock Thinking the unthinkable: Sacred values and taboo cognitions Trends in Cognitive Sciences 7 2003 320-4 Medline
Tetlock et al., 2000 ; ; P.E. Tetlock O.V. Kristel S.B. Elson M.C. Green J.S. Lerner The psychology of the unthinkable: Taboo trade-offs, forbidden base rates, and heretical counterfactuals Journaf Personality and Social Psychology 78 2000 853-70 Medline
Verkuyten y Yildiz, 2007 ; ; M. Verkuyten A.A. Yildiz National (dis)identification and ethnic and religious identity: A study among Turkish-Dutch muslims Personality and Social Psychology Bulletin 33 2007 1448-62 Medline DOI
Whitehouse, 2004 ; ; H. Whitehouse Modes of religiosity: A cognitive theory of religious transmission 2004
Whitehouse et al., 2014 ; ; H. Whitehouse B. McQuinn M. Buhrmester W. Swann Brothers in arms: Lybian revolutionaries bonike families
Proceedings of the National Academy of Sciences 111 2014 17702-3
Ángel Gómez Jiménez1 , Lucía López-Rodríguez1 , Alexandra Vázquez1 , Borja Paredes1 , Mercedes Martínez1
1Univ. Nal. Educación a Distancia, Fac. Psicología, Dep. Psicología Social y de las Organizaciones, Madrid, España
You have requested "on-the-fly" machine translation of selected content from our databases. This functionality is provided solely for your convenience and is in no way intended to replace human translation. Show full disclaimer
Neither ProQuest nor its licensors make any representations or warranties with respect to the translations. The translations are automatically generated "AS IS" and "AS AVAILABLE" and are not retained in our systems. PROQUEST AND ITS LICENSORS SPECIFICALLY DISCLAIM ANY AND ALL EXPRESS OR IMPLIED WARRANTIES, INCLUDING WITHOUT LIMITATION, ANY WARRANTIES FOR AVAILABILITY, ACCURACY, TIMELINESS, COMPLETENESS, NON-INFRINGMENT, MERCHANTABILITY OR FITNESS FOR A PARTICULAR PURPOSE. Your use of the translations is subject to all use restrictions contained in your Electronic Products License Agreement and by using the translation functionality you agree to forgo any and all claims against ProQuest or its licensors for your use of the translation functionality and any output derived there from. Hide full disclaimer
© 2016. This work is licensed under https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/deed.es_ES (the “License”). Notwithstanding the ProQuest Terms and Conditions, you may use this content in accordance with the terms of the License.
Abstract
Recientemente se han propuesto 2 aproximaciones teóricas que tratan de explicar por qué algunas personas están dispuestas a morir y matar por su grupo o por sus creencias. La fusión de la identidad es una conexión visceral con un grupo que predice la disposición a comportamientos extremos por el grupo. La teoría de los valores sagrados sostiene que algunas personas tienen una conexión visceral con un valor que les lleva a considerarlo sagrado y predice la disposición a hacer sacrificios costosos por dichos valores. El modelo de los actores devotos postula que quienes mantienen ciertos valores sagrados y están fusionados con el grupo que comparte dichos valores estarán dispuestos a hacer sacrificios excepcionalmente costosos y extremos por sus creencias y/o por su grupo. El presente trabajo analiza estas teorías y el modelo de los actores devotos desde el punto de vista de su relación con el terrorismo.





