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Junto con el boom minero que atravesó el país, Perú ha visto crecer en su territorio la minería ilegal. En el ranking de las principales actividades delictivas de acuerdo con la cantidad de dinero que movilizan, la minería ilegal continúa compartiendo los primeros lugares con el narcotráfico y la tala ilegal, pese a la baja de los precios de los minerales en el mercado mundial. Los mineros ilegales e informales han logrado incluso desplegar eficaces estrategias de influencia y han construido puentes con la política.
Palabras claves: extractivismo, minería ilegal, minería informal, Madre de Dios, Perú.
* Antecedentes
La evolución y el dinamismo alcanzados por la economía peruana durante casi una década (2003-2012) han estado acompañados del crecimiento de varias actividades abiertamente ilícitas: tala y minería ilegales y narcotráfico son algunos de los rubros que se han expandido en diferentes zonas del país, y su influencia ha sido y continúa siendo manifiesta en los territorios donde se han implantado. El caso de la minería es bastante especial, en la medida en que en Perú esta actividad juega un rol gravitante: actualmente representa algo más de 12% del pib, al mismo tiempo que contribuye con alrededor de 60% de las exportaciones y da cuenta de 21% del stock de inversión extranjera directa.
Perú se ubica en lugares destacados en el ranking mundial de producción minera (entre tercero y octavo lugar para la mayor parte de los minerales). Además, el país es un buen ejemplo de las tendencias globales de expansión minera ocurrida en las dos últimas décadas. Son casi 20 años de crecimiento continuo de la minería: en 1993, con la entrada en producción de la Minera Yanacocha -que se convirtió rápidamente en la principal mina de oro de América Latina-, se inició formalmente una etapa de expansión productiva y de inversiones a lo largo y ancho del territorio peruano. Es importante subrayar que, hasta antes de la entrada en producción de Yanacocha, la mayor parte del oro peruano se producía de manera informal, precisamente en el estrato que las estadísticas oficiales denominaban «aluvial y lavaderos». Por otro lado, junto a la dimensión productiva -los flujos de inversión que se mueven en torno de la minería y del creciente comercio internacional-, hay una dimensión territorial...