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Resumen: Este trabajo parte del análisis estético de algunas formas artísticas y culturales del siglo XXI para finalizar tratando la crueldad y la violencia como principal eje vertebrador del teatro de la catalana Angélica Liddell: una dramaturga reconocida en la escena actual por llevar al límite sus representaciones. Además de todo esto, se establecen fugaces relaciones y reflexiones sobre la forma, textura y texto, que concluyen en que el odio y el rechazo al sistema neoliberal es un principal factor de creación cultural.
Palabras clave: crueldad, teatro, Angélica Liddell.
ABSTRACT: This work is based on the aesthetic analysis of some artistic and cultural forms of the XXI century and it finishes treating cruelty and violence as the main axis of the theater of the catalan Angélica Liddell, a playwright known because she carry the limit their representations. In addition, I establish fleeting relations and reflections on form, texture and text, which conclude that hatred and rejection of the neoliberal system is a major factor of cultural creation.
Key words: cruelty, theater, Angélica Liddell.
Introducción
En este trabajo me adentro en el mar revuelto de las formas artísticas de principios de finales del siglo XX y principios del XXI. En concreto, analizo cómo se expresa un sujeto atravesado por la violencia y la crueldad del Estado español. Una violencia que se puede resumir identificándola con el año 2017, en pleno capitalismo avanzado, y con los gobiernos de Mariano Rajoy y Donald Trump. En fin, la violencia de la Posmodernidad (de aquí en adelante utilizo el concepto "Posmodernidad" siguiendo la idea de David Becerra (2013: 30): como sinónimo de "ideología del capitalismo avanzado en el ámbito cultural1"). También del terrorismo de Estado, esa violencia global que se autodefine como guerra antiterrorista, pero es terrorista ella misma porque recurre a la violencia masiva, provocando millones de desplazados y cientos de miles de víctimas fatales (Calveiro, 2012: 86), sin necesidad de verter sangre, porque pueden ser ataques a los sistemas de pensiones, la subida del precio de la electricidad que causa incluso muertes por frío o calor, discriminación al refugiado político, persecución del disidente mediante la Ley Mordaza2, etcétera.
Me parece interesante cuestionarme qué lenguaje, qué estética, se ha creado para canalizar toda esa rabia, como se plantea...