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Un pasado presente
De alguna manera CaIi y el departamento del Valle del Cauca, a principios de la década de los noventa, marcaban el meridiano por el cual cruzaba la compleja y ambigua relación que siempre ha existido en nuestra sociedad entre política y narcotráfico. Una relación que ha oscilado entre la connivencia de la politica con el crimen, derivada de mutuos beneficios, o la confrontación visceral y terrorífica, por incompatibilidad de intereses y valores. En el polo de la connivencia, giraba entonces la relación del denominado "Cartel de Cali", bajo el mando de los hermanos Rodríguez, y en el polo del terror, Pablo Escobar, con sus estructuras criminales en Medellín. No obstante, ambas formas de relacionarse con la política coincidían en el objetivo estratégico de impedir a toda costa la aplicación del temido tratado de extradición con los Estados Unidos. Objetivo que fue alcanzado a través del ya derogado artículo 35 de la Constitución de 1991, que prohibía la extradición de colombianos por nacimiento. En dicha coyuntura, la coincidencia de intereses los llevó a formar una coalición, asumiendo cada parte una división del trabajo según sus fortalezas. Los Rodríguez centraron su influencia en Io que se podría denominar el testaferrato politico, a través de delegatarios y funcionarios dentro de la Asamblea Nacional Constituyente, partidarios de la prohibición de la extradición, en una típica y exitosa maniobra de cabildeo político. Mientras que Pablo Escobar recurría a presiones más directas y terroríficas, mediante el secuestro y asesinato de personas allegadas a las élites del poder económico y político, tales como los secuestro del entonces periodista de El Tiempo Francisco Santos y el de doña Marina Montoya, cruelmente asesinada, hermana del entonces secretario general del presidente Virgilio Barco.
Pero antes de esta peculiar y efectiva forma de relacionarse ambos carteles con la política, tuvimos en nuestra historia reciente un episodio que marcó el nacimiento del paramilitarismo como hijo legítime del narcotráfico, fruto de la primera coalición de estas dos organizaciones ilegales con agentes y estructuras de la inteligencia militar. El episodio fue el secuestro de Martha Nieves Ochoa1 por parte del M-19, que propició la conformación del MAS, Muerte a secuestradores, y su aparición pública mediante el lanzamiento de panfletos en la ciudad de CaIi el...