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"Salvador" o "Chava" como algunos le decíamos con cariño, fue parte de la vida de este Instituto durante treinta años. Vecino, colega, amigo, recordamos a Salvador por su charla amena llena de anécdotas y excelente humor, pues tenía la particularidad de reírse a sus anchas de los chistes que él mismo contaba.
Aunque escasas y viejas por el paso del tiempo, aún conservamos algunas de las fotografías de aquella Pastorela sui generis que estrenamos por única ocasión en 1984. En esa "teatral" ocasión, Salvador Armendares representó magistralmente el papel de Lucifer, arrancando risas y aplausos de un nutrido público universitario, de familiares y amigos.
Quién iba a pensar que bajo ese atuendo de diablo, se ocultaba un genetista de renombre y amplia trayectoria universitaria que se empezó a trazar desde 1950, cuando se convirtió en médico por la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México.
En 1956 hace la especialidad en pediatría en el Hospital Infantil de México y de 1964 a 1965 realiza estudios especializados en genética humanan en el British Medical Research Council de Oxford en Inglaterra.
Su amplia experiencia profesional en el campo de la pediatría y en la investigación de la genética humana, le permiten formar parte del cuerpo...