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EL EVEREST
En un hotel de cinco estrellas de Katmandú, un grupo de turistas bebe agua en vasos color verde botella, sin saber que estos han recorrido un largo camino: se trata de desechos reciclados del Everest. Vasos, botes, lámparas... Algunos residuos recogidos en las laderas del Everest, a veces también llamado "el vertedero más alto del mundo", encuentran así una segunda vida en la capital nepalí gracias al reciclaje. Cada año, se recuperan toneladas de basura en la montaña de 8.848 metros de altitud. Centenares de alpinistas llegan cada primavera (boreal) ansiosos por incluir esta cumbre en su palmarés, dejando cantidades de desechos como tubos de oxígeno, botellas y material de alpinismo. "Los desechos no están necesariamente perdidos", explica Nabin Bikash Maharjan, de la organización local de reciclaje Blue Waste to Value (BW2V). "Hemos recibido materiales diversos del Everest que en su mayoría no podía ser reciclado", indica....